Esta Luna Nueva en Piscis que ocurre hoy a las 16.30, hora de Europa central. Nos revela una escisión cada vez más potente. Separación entre el miedo y el amor, entre el sentimiento de extravío y el equilibrio. Entre el enganche al colectivo y la libertad del viaje. Entre un estado interior de contractura que no permite que el respiro descienda en el cuerpo, y la aceptación de pertenecer a un flujo de vida regulado por la inteligencia divina que nos habita.
A menudo, sin embargo, no somos conscientes de nuestro poder creativo innato y nos dejamos llevar por los contenidos inconscientes. Atraemos lo que no queremos y nos defendemos, nos endurecemos en posiciones enraizadas en el miedo….la mente se siente inquieta, habla, habla, no puede calmarse. Trata de defenderse de de algo que existe, pero que es difícil de asimilar. Nos convence de que la realidad es otra. Crea muros de negación. El desafío está en discernir entre la realidad y el sueño. ¿Qué puedo aceptar de la realidad que vivo? ¿Qué debo rechazar de la existencia que me incomoda? Tratemos de no juzgarnos y aceptar nuestras resistencias.
Esta lunación pone al descubierto la verdadera frecuencia en la que resonamos, y nos estimula a estar en equilibrio. Sobre todo en estos días se hace bien visible cómo trabaja el miedo, cuánto espacio ocupa dentro nuestro, cómo se insinúa y desplaza la atención hacia el malestar y dolor que contenemos. La conjunción contemporánea entre Lilith y Quirón en Aries, constituye una escudo protector…nos hace permanecer inmóvil e impide dejarnos arrastrar por la invasión del miedo. La fuerza rebelde de la Lilith en este momento resulta extremadamente funcional para mantenerse alejado de lo que se siente no verdadero, equivocado o incómodo. Es una gran llamada al descubrimiento de la verdad interior.
Permanezcamos centrados, respiremos, en equilibrio, en nosotros.….mientras nos dejamos atravesar por los flujos de nueva información que llegan de las profundas dimensiones de la esencia.
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